Friday, March 18, 2005

Franco, los gays y otros avances

Viene muy movidito el día, tanto que me resisto a hablar tan solo de un tema. ¡Pasen y vean!
- Francia oficializa su negativa a la directiva Bolkenstein (yo quiero una derecha así).
- El PP llama radical a Zapatero por la retirada de la efigie ecuestre de Franco.
- El matrimonio homosexual supera su primer escollo parlamentario con la única oposición de PP y Uniò Democràtica de Catalunya.
Con respecto a la postura francesa, la cámara legislativa ha apoyado las tesis de Jacques Chirac pidiendo la modificación de la directiva de liberalización de servicios (conocida como Bolkenstein "en honor" al Comisario encargado de su elaboración) por ser susceptible de crear dumping social en un terreno poco armonizado de la economía europea, como es la prestación de servicios.
Desde luego no es la opinión "ideal", de hecho el Partido Socialista y el Partido Comunista votaron en contra puesto que ellos solicitaban no una modificación, sino una retirada "pura y simple"; pero no hay que negar que es un avance que un partido conservador se oponga a las ideas del presidente de la Comisión Europea, el también conservador Jose Manuel Durao Barroso. Tal vez mi alegría no esté justificada, ya que la derecha francesa siempre ha sido anti-liberal, pero, en fin, prefiero ver el vaso medio lleno. Así que, desde aquí, un aplauso para Jacques Chirac y dos aplausos para el PSF y el PCF por su agresivo discurso en defensa de los trabajadores europeos.
Segundo tema del día. Que Eduardo Zaplana es un ciudadano con unas características políticas cuando menos cuestionables es algo que, a día de hoy, pocos dudan...La última andanada del expresidente valenciano (recordemos, el presidente autonómico que tiene en su haber el lamentable record de mayor endeudamiento per capita en la historia de la democracia española) es haber tachado al gobierno de Zapatero de radical (no sé si con "c" o con "k") por haber retirado la efigie del ex-dictador Franco Bahamonde situada en una conocida plaza de la capital.
La retirada de símbolos con valor historiográfico es un tema polémico. Yo no me siento capacitado para dar una opinión sin reconocer que la otra también es comprensible. Ahora bien, cuando la historiografía colisiona con los sentimientos que la estatua en cuestión pueda despertar en la conciencia colectiva, yo lo tengo claro: No quiero ver ni una lágrima, ni un cara de sufrimiento, ni un sentimiento de amargura por culpa de un señor montado a caballo...sea Franco o cualquier otro.
Los colectivos homosexuales han saludado con satisfacción el primer paso dado por la ley que les permitirá casarse y adoptar. Ya era hora que se acabase con la última segregación por motivos naturales existente en nuestro país. ¿Nos parecería normal que no se permitiese el matrimonio a los ciudadanos de color? Pues que sepáis que en los años 50 y 60 sesudos estudios de prestigiosas universidades estadounidenses advertían de los "peligros" de los matrimonios interraciales, y del daño sicológico que los niños podían sufrir porque mamá era negra y papá blanco...Los homosexuales son ciudadanos como tú y como yo, y deben tener los mismos derechos y obligaciones. Lástima que aquellos que braman por la retirada de estatuas fascistas voten en contra de leyes que nos permiten ser iguales...quizás vivían mejor en otros tiempos.
Por hoy basta...creo que ya me he pasado.

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